El senador y precandidato demócrata a la presidencia Bernie Sanders, habla a los seguidores en su primer acto de campaña en Miami en el James L. Knight Center
Bernie Sanders ganó las elecciones primarias demócratas en Michigan, imponiéndose a Hillary Clinton en un estado industrial en el que los votantes expresaron preocupación por el comercio y sus empleos.
Pese a su ajustada victoria, el senador no obtendrá ningún avance real en delegados por la noche del martes. Y Clinton ha conseguido ya más de la mitad de los 2,383 delegados que necesita para obtener la candidatura demócrata.
Con 130 delegados en juego en Michigan, Sanders obtendrá al menos 63 y Clinton al menos 52. Los avances de Sanders se verán empañados por la victoria anterior de Clinton en Mississippi. La ex secretaria de Estado inició la noche con una ventaja de 169 delegados sobre su rival, teniendo en cuenta sólo las primarias y asambleas de partido.
Los demócratas otorgan sus delegados en proporción a los votos, de modo que Clinton pudo sumar bastantes delegados pese a perder en Michigan.
Cuando se tienen en cuenta los superdelegados, su ventaja es aún mayor, de al menos 1,214 frente a los 566 de Sanders.
Aun así, Sanders podría conseguir una pequeña racha de victorias en varios estados que otorgan muchos delegados la semana que viene.
Desde el Supermartes, Sanders se ha impuesto en cuatro de los últimos seis estados que celebraron primarias. Los votantes demócratas acuden la semana que viene a las urnas en Ohio, Illinois, Missouri, North Carolina y Florida. En total se repartirán 691 delegados. El Nuevo Herald
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